Bonificaciones no salariales: su funcionamiento y beneficios
12 Enero 2024
Las bonificaciones no salariales, ya sean en forma de regalos, bonos, tarjetas de vales o dinero en efectivo, son un método atractivo para nutrir tu estrategia de retención y motivación. Hay distintas formas de implementarlos dentro de un plan de bienestar laboral dependiendo del presupuesto, objetivo y el grupo de empleados. Pero hay una ventaja para todos los casos: el ahorro que puedes percibir en los costos de nómina.
Partamos de una realidad en Colombia, que resalta Juan David Barbosa, Gerente general de Fisapay: cuando se contrata bajo un salario mínimo, ese no es el valor real que paga el empleador. A este debe sumarse el factor prestacional que aumenta entre un 45 % y 55 % el costo final.
Ese factor prestacional corresponde a:
- Los aportes.
- Prestaciones obligatorias.
- Seguridad social.
- Subsidios
- Otras figuras a las que tienen derecho los trabajadores, según el Código Sustantivo del Trabajo.
¿Quieres ofrecer bonificaciones laborales no constitutivas de salario? Es esencial que conozcas las claves para no aumentar los (ya altos) costos de nómina.
¿Qué son las bonificaciones no salariales?💳
Constituyen pagos adicionales que los empleadores otorgan a sus empleados, como incentivos o reconocimientos por su desempeño o logros particulares.
Ahora, ¿Cuál es la principal diferencia entre una bonificación no constitutiva de salario y un salario variable? Esta radica en la forma en que se otorgan y se consideran en términos laborales. Por ejemplo:
- Bonificaciones no constitutivas de salario: son pagos excepcionales y voluntarios que no forman parte del sueldo base.
- Salario variable: es una parte variable del salario total que depende de ciertos criterios preestablecidos. Estos pueden ser el rendimiento individual o los resultados financieros de la empresa.
- Salario emocional: es uno de los beneficios laborales más apreciados por los colaboradores. Incluye ingresos no tributarios, como los bonos de alimentación Pluxee Canasta.
Por qué implementar este tipo de incentivos
Mantener un esquema de compensación eficiente en la empresa es clave para una buena gestión del talento humano. A continuación, las ventajas de contar con bonificaciones no salariales:
- Para las organizaciones: aumenta la lealtad y compromiso de los empleados, mantiene su motivación e incrementa la eficiencia laboral sin añadir costos laborales.
- Para los empleados: mejora su calidad de vida con prestaciones que complementan su salario. Así, aumenta la felicidad en el trabajo, además de reconocer su buen desempeño. Al ofrecer mayor bienestar y fidelizar a los colaboradores, también se reduce el ausentismo laboral y la rotación de personal.
Requisitos legales para otorgar bonificaciones no salariales
Estos son los principales requisitos que deben cumplir las empresas colombianas para entregarlas:
- De acuerdo con el Art. 127 del Código Sustantivo de Trabajo, la entrega de los bonos no puede ser como “contraprestación de su servicio”.
- Una persona con salario integral puede recibir el beneficio tributario de alimentación. Según el Art. 387-1 del Estatuto Tributario, su salario no puede superar las 403 UVT mensuales.
- Este mismo artículo establece que los vales de alimentación no constituyen ingreso tributario para el trabajador. Por lo tanto, no están sujetos a retención en la fuente ni impuesto de renta.
- Los colaboradores de la empresa deben contar con un contrato de trabajo que sustente la relación laboral. Además, su salario no debe superar las 310 UVT.
- El pago de las bonificaciones debe realizarse con intermediación de un tercero.
Consideraciones fiscales
En la mayoría de los casos, las bonificaciones no constitutivas de salario están sujetas a impuestos y cargas sociales. Y, aunque no formen parte del salario base, se consideran ingresos adicionales. Por esta razón, deben ser declaradas parte de la renta gravable del empleado.
A continuación, algunas consideraciones fiscales para tener en cuenta (Alcaldía de Bogotá, 2021; Gobierno de Colombia, s.f.):
- Art. 107 del Estatuto Tributario: son deducibles las expensas realizadas durante el año o período gravable en el desarrollo de cualquier actividad productora de renta, siempre que tengan relación de causalidad con la misma y que sean necesarias, además de proporcionadas de acuerdo con cada actividad.
- Art. 387-1: advierte que los pagos por concepto de la compra de vales o tiquetes para la adquisición de alimentos no constituyen ingreso tributario para el empleado, siempre y cuando el beneficio no supere las 41 UVT (lo que equivale a $1.460.000). Adicional, que el salario del colaborador no supere 310 UVT.
- Art. 10 del Decreto 535 de 1987: si entregas bonos y tarjetas destinadas a la compra de herramientas de trabajo, no quedará en cabeza del colaborador y no será considerado un ingreso tributario para ellos. Así, no tendrán lugar a retención en la fuente ni harán parte de su declaración de renta.
Art. 10 del Decreto 535 de 1987: si entregas bonos y tarjetas destinadas a la compra de herramientas de trabajo, no quedará en cabeza del colaborador y no será considerado un ingreso tributario para ellos. Así, no tendrán lugar a retención en la fuente ni harán parte de su declaración de renta. Conoce la diferencia entre incentivos, reconocimientos y beneficios. 👈
Las claves para entregar bonificaciones no salariales en tu empresa✔️
El Código Sustantivo del Trabajo es claro al especificar la naturaleza de los pagos que pueden (y los que no, también) ser considerados salario ante la ley colombiana. Por lo tanto, si estás construyendo tu programa de beneficios laborales, o deseas hacerlo, ten en cuenta sus aspectos clave.
Bonificaciones ocasionales
¿Buscas encontrar la forma de motivar a tus colaboradores sin aumentar los costos laborales? La entrega de bonificaciones no salariales ocasionales es una de esas formas.
De acuerdo con el Art. 127 del Código Sustantivo del Trabajo, constituye salario todo lo que recibe el trabajador en dinero o en especie, como contraprestación directa del servicio, primas, sobresueldos, bonificaciones habituales, valor del trabajo suplementario, entre otros.
Esto quiere decir que si entregas las bonificaciones (ya sean tarjetas de alimentación o bonos) sin una periodicidad establecida, no se considerará salario y no aumentarán las cargas laborales.
Las bonificaciones no salariales permiten nutrir programas de reconocimiento y retención de talento. Puedes entregar bonos en diferentes periodos del año, aprovechando fechas especiales como Navidad, aniversarios o cumpleaños.
Bonificaciones habituales pactadas como no salariales con antelación
Estas bonificaciones no constituyen salario en todos los casos. Puede realizarse un acuerdo previo entre empleado y empleador para que las bonificaciones habituales y de entrega regular, no sean consideradas salario. Así lo dispone el Art. 128 del Código Sustantivo del Trabajo, donde explica los tipos de pagos que no constituyen salario, los cuales son:
- Ni los beneficios o auxilios habituales acordados convencional o contractualmente u otorgados en forma extralegal por el empleador, cuando las partes hayan dispuesto expresamente que no constituyen salario en dinero o en especie. Es decir que, si deseas entregar bonificaciones no salariales todos los meses como parte de la remuneración, sin que esto aumente los costos de nómina, debes realizar un acuerdo con tus empleados.
- Ni las sumas que ocasionalmente y por mera liberalidad recibe el trabajador del empleador. Por ejemplo, primas, bonificaciones y gratificaciones ocasionales. Aquí, el concepto de mera liberalidad es importante. Quiere decir que el empleador entrega las bonificaciones (bonos o tarjetas) por deseo propio, sin ningún tipo de obligación. Estos extras tampoco se consideran un incremento salarial.
Recuerda que la comunicación clara es esencial para las estrategias de retención y para que no haya malentendidos a futuro. Además, la única forma de acordar estos pagos es con un contrato laboral y un previo acuerdo entre ambas partes.
Bonificaciones no salariales: vestimenta y transporte
De acuerdo con el Art. 128 del CST, no se considera salario lo que recibe (el trabajador) en dinero o en especie para desempeñar a cabalidad sus funciones, como gastos de representación, medios de transporte, elementos de trabajo y otros semejantes.
Así, la vestimenta y el transporte constituyen bonificaciones no salariales. Para hacerlas efectivas, debe garantizarse la correcta destinación del recurso entregado. Sobre el transporte, existen dos figuras que no se consideran salario y satisfacen esa necesidad: auxilio de transporte y de rodamiento.
Aunque el transporte y la vestimenta no enriquecen al trabajador, son fundamentales para que pueda realizar sus tareas sin problemas. Por eso, pueden no ser considerados salario.
Tarjeta de alimentación Pluxee Canasta ¡Tu mejor opción!💚
¡La clave para la motivación laboral es ofrecer una remuneración estratégica! Pluxee Canasta es una excelente opción en bonificaciones no salariales. No solo fortalece el plan de beneficios de tu compañía, también ayuda a optimizar costos en tu empresa. Estas son sus ventajas:
- Los bonos de alimentación facilitan el acceso a una alimentación saludable y acorde a los gustos del colaborador y su familia. Con Pluxee Canasta pueden adquirir sus alimentos en supermercados, minimercados, grandes superficies y restaurantes.
- No constituyen ingresos tributarios para el colaborador. Así que, no están sujetos a retención en la fuente ni impuesto de renta.
- Representan una posibilidad de ahorros en costos laborales al implementarlo como ingreso no salarial.
- Contribuyen a la felicidad laboral, el clima y la motivación de los empleados, impactando positivamente en la productividad empresarial y la retención de talento.
- Pueden usarse en más de 24.800 supermercados y restaurantes a nivel nacional.
Ahora sabes cuál es el tratamiento de las bonificaciones no salariales en Colombia. Ten en cuenta que su objetivo no es únicamente darles un respiro a los costos de nómina de tu empresa. Busca el equilibrio entre las necesidades, deseos y expectativas de tus colaboradores, y las finanzas y posibilidades de tu organización.
Así conseguirás ahorrar dinero y disminuir gastos sin dejar de impulsar tus estrategias de retención, mientras promueves el reconocimiento laboral, bienestar y calidad de vida de tu gente.
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